La Corte Constitucional mediante la Sentencia C-355 de 2006 definió que la interrupción voluntaria del embarazo es un derecho fundamental en 3 circunstancias: cuando la continuación del embarazo constituya peligro para la vida o la salud de la mujer; cuando exista grave malformación del feto que haga inviable su vida; o cuando el embarazo sea el resultado de una violación.
El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos – INVIMA, aprobó a Profamilia la comercialización en Colombia de Mifepristona, un tratamiento para la interrupción del embarazo, que, en combinación con el Misoprostol, ofrece mayor eficacia y seguridad que las alternativas ya existentes.